Cómo no, hay que hacerse eco de la noticia del día... Podía haber sido una falsa alarma (ya tenía precedentes) pero no, la noche antes de Halloween ha nacido Leonor.
Había quien hacía apuestas, otros afirmaban que no sería Leonor sino Pelayo, y en el fondo, un Pelayo hubiera facilitado lo que se nos viene encima.
Quizá se tenga que reformar la Constitución para aceptar el Estatuto catalán (si se aprueba, claro) pero seguramente se tenga que reformar por Leonor (al menos, eso es lo que dice, sin quebradero de cabeza alguno, el padre).
Así que, sin duda, más problemas para esta, de momento, España nuestra, a la que al igual que a Letizia (con z, por supuesto) hace dos años, le quedan dos telediarios.